A fuego lento


Llevaba bastante tiempo sin siquiera entrar por aqui, quisé dejar este lugar, como uno más de los que en diferentes ocasiones, me dejaba caer para reflejarme a mí misma, quizá de una manera más o menos equivocada, e incluso no tanto, eso sí, siempre con mi propio yo, con el que cada día lucho para tener un día más.

Hace unos días, opté por descantar la continúa busqueda de tener un culpable a mi situación, a quien culpar de todo lo que me sucede porque he llegado a un punto, en el que creo que el abandono no es casual, del mismo modo que tampoco lo es el reencuentro, aún así, he empezado a descantar el rencor, la venganza, y otros cuantos sentimientos que me producen simplemente pensar en el futuro, ese que tanto me aterra, que tanto miedo me da, cuando miro a mi alrededor, y me doy cuenta, que la vida, sin más continua, pero de diferente modo, con el que yo creía que debería continuar, aún así, puedo contar con los dedos de una mano, los días, e incluso las semanas, y aún así, podrian sobrarme dedos.


Podría tirarme días enteros mirando por ventana viendo pasar los días, percatándome de mi realidad, esa que hay quienes se pasan la vida entera negando y dejando pasar el tiempo, pero sin darse demasiada cuenta, que es precisamente tiempo, lo que no hay.

Creí ver una realidad al final de este camino, que parecía haberme dado una nueva oportunidad, pero siempre he pensando, que las segundas oportunidades, nunca son buenas, y una vez más, me he dado cuenta, que es cierto mi pensamiento.

He dejado pasar los días, las semanas e incluso los meses, engañandome a mi misma de mi realidad, pensando que, todo es posible, pero por mucho que hayan otras opciones me niego a continuar así, no merece la pena, sin más tener más tiempo, cuando se perdieron las ganas con las que dejar el temor de lado y no permitir que sea pánico el que sienta cuando me veo sin más caer en picado.

No suelo adelantarme a los acontecimientos, sin embargo, hoy lo hice, pareciéndome las palabras como caídas de un paragüas que hipotéticamente me protegen de recaer, sin ciertas palabras, temo que me sentiria realmente desprotegida, a la llamada del día a día de está experiencia que no parecen haber sido suficientes para forzar el cambio, y sin más, huir de lo que me produjo está situación, una enfermedad a la que muchos temen, y cuando la vives, te das cuenta, de lo que realmente tienes a tu alrededor, y con ello, intentas ser mejor persona, sino mejor, por lo menos, valorar lo que no se valoraba, o por lo menos, darme cuenta de la persona en que supuestamente me he convertido, cuando ya siquiera me reconozco, me miro constantemente en el espejo, y empezo a pensar en el quien soy realmente y poder continuar mi día a día habitual, sin volver sobre mis pasos que me recuerden el último capítulo de mi vida.

Por mucho que intente buscar culpables, no hay mayor culpable que yo misma, soy la única culpable de lo ocurrido.
Mi salvavidas, me acaba de explicar que mientras no conozcamos las causas de cada una de mis decisiones, causas por mi rabia por lo que me sucede, no seré capaz de aceptar realmente, que hay otras opciones con las que darme esa segunda oportunidad, y tener ese último capitulo en mi vida.
Sin embargo, mi plantenamiento es bastante distinto... 

No trato de cambiar de familia, de amistades, de trabajo e incluso de residencia, solamente trato de refrescarme y cargar pilas, marchar a dormir, sin tener que levantarme cuando será el último día.

Hace años, opté por introducir en mi vida, compañia, dejar de lado mi soledad, para volver a sentir, que era preocuparse por los demás, fue un cambio drástico, asimilando poco a poco, que todavia hay en quien volver a enamorarse, e incluso pensar que la gente que rodea, no son solamente personas que pasan un momento por mi vida, sino que son gente, que cuando pasan por mi vida, dejan huella, con la que tuve que asimilar la nueva gente que empezó a entrar en mi vida, esa que hubo quien la tambalaó de tal manera, que era incapaz de permitir conocerme realmente, quizá equivocación, porque he de reconocer, que en los últimos cinco años, he conocido gente encantadora, algunos se quedaron en mi vida, otros sin más, desaparecieron, pero guardo un buen recuerdo que dificilmente se puede olvidar.

Quizá, debería tomarme las cosas menos a pecho, ser menos calculadora, incluso menos egoista o qué se yo, que me haga pensar menos en mis decisiones y más en los demás, y es cuando realmente, me pregunto... ¿cómo me voy a plantear algo así, si es prácticamente lo mismo que tenía cuando no permitia que hubiese nadie en mi vida?, los últimos meses, me han demostrado, que realmente, es así... quizá me equivoque, pero no sé porqué, me da que va a ser que no me estoy equivocando. Seguramente, será el tiempo quien acabe dándome la razón.

Hoy, me asaltó el recuerdo, de echo, llevo días en que los textos guardados, algunos que me mandaron y otros que ya tenia, me hacían darme de cuenta, de todo cuanto se ha cambiado, y con ello, darme cuenta, que es cierto, lo que en muchas ocasiones he comentando, el problema, que pocos son que se dan cuenta de la situación, cuando haya quien quiera darse cuenta, el tiempo se habrá acado, y con él, la oportunidad de separar el camino por el que pasan las personas por la vida, sin conocer el valor de la amistad y otras, como yo, corremos el riesgo de perder la vida sin haber aprendido a disfrutar plenamente de ella, porque para lograrlo, debería correr el riesgo de equivocarme, dejando de preocuparme que si mi entorno, ese que tanto mal hacen, que si el trabajo, que si el piso, que si las facturas... que sí, que si, que sí...

En fin, resumiendo a grandes rasgos... a fuego lento...

PD: Gracias por venir salvavidas.

1 comentario:

  1. ich kann nicht aufhören zu lügen versprach mir, dass alles gut gehen würde dabei zu bleiben. ein Freund, der Sie sehr liebt.
    jesus

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