
Desde hace unos días, parece que mi vida, ha dado un cambio considerable, el caso, es que todo sigue casí que igual, la mayor diferencia, es que todo va a cuestión de pruebas, como que cada día, tiene un número menos, pero, sigue igual, no hay demasiados cambios.
Estoy, en proceso, digamos de aceptación, mi cabeza va muy rápido y mis sentimientos, muy despacio, porque se niegan a que sea otra vez, porque sinceramente, no entraba en mis planes, y mucho menos, mis planes futuros, habían otras muchas cosas, que parece, que empiezan a dejar de ser tan importantes, porque esto, es lo que va primero, en cambio, mi dia a día es bien distinto, empieza la jornada a las 9 de la mañana, primero la cama, luego la lavadora, tender la ropa, barrer mi casa luego fregar el suelo, pensar que haré para comer, no olvidar ir a comprar... en cambio, aunque continua todo igual, primero son las vueltas de mi cabeza, segundo siguen siendo las vueltas de mi cabeza y siempre son las vueltas de mi cabeza, por momentos, me miro en el espejo y me digo, "no eres más tonta, porque no te entrenas", pero no puedo evitarlo, porque no dejo de darle vueltas incluso adelantándome a los diferentes matices que me esperan, preparando mi mente a todo un proceso, creo que largo, o por lo menos, que dure el tiempo que tenga durar, cierto es que, ahora mismo, me da igual el final, solo que acabe, de cualquier manera, pero que acabe... para poder quedarme tranquila, quisiera que acabase hoy o no hubiera tenido un comienzo.
Curiosamente, desde hace unos días, mis ojos parece que no ven, mis oidos escasamente escuchan, porque siempre hago lo que me da la gana, puedo escuchar, dar incluso la razón, pero ya decidir, ya es otro mundo, aunque yo misma pueda saber que me voy a equivocar, pero a veces, es mejor poco y mucho, que demasiado y mal... las palabras se quedan mudas ante lo que pueda pasar, mis pensamientos piensan solos, no sé si será la costumbre, tampoco si es por todo lo que vivido anteriormente que me ha creado una coraza tan grande que tiene capas demasiado grandes, si quiera escucho a eso que dicen o llaman "mi interior" el caso, es que yo lo busco, y como que no lo encuentro, supongo que me lo he dejado en algún lado.
Me encuentro bien, muy bien, aunque nunca es demasiado bien, creo que aspiro a más... todos estos días, cuando no dejo de pensar, lo único que siento es nada, no es pasotimos ni prepotencia, (aunque dicen que soy prepotente, borde, vamos tengo unos adjetivos, bien chulos y todo, casi nada) es simplemente que no siento lo que quizás debería sentir.
He llegado a un punto en el que mis planes más lejanos, son los que voy a hacer en los próximos diez minutos; prefiero vivir lo que vaya viniendo que sufrir por que pueda vivir, y ahí creo que es donde está la clave, para lo que tanta gente llama felicidad, vivir el presente sin escuchar lo que venga en un futuro... pero... yo tenía o tengo planes, o por lo menos, metas que desde hace unos meses, estaban en mi lista de favoritos, y han pasado a estar en mi lista de espera, como las salas cuando vas a algún lugar y tienen esas salitas y te toca esperar, pues igual... ahora, mi lista de favoritos, está esperándome...
En mi interior, hay un silencio que me ensordece, no pienso, solamente actuó, me levanto, porque tengo que levantarme, me voy a dormir porque tengo que dormir, y hago todo lo que tengo que hacer, porque tengo que hacerlo, no me predispongo, me dejo sencillamente llevar, tampoco pronóstico, solamente vivo, pensando pero vivo...
Soy consciente de todo lo que está empezando a pasar, otra vez, sé cuales van a ser los pasos a seguir, podría hacer el mismo trayecto de hace unos años, con los ojos incluso cerrados, pero si es cierto, que espero poder saltarme unos cuantos y cuando llegue, sea una meta diferente a Ricardo, últimamente, está en todos mis pensamientos, no consigo sacarle de mi cabeza, me produce no sé si llamarlo impotencia, pero tal vez, también miedo, porque él, lucho que si lucho, hasta dejó de fumar, porque dicen que es malo fumar, pero... ¿de qué le sirvió?, yo también fumo, pero no me planteo dejar de fumar, disfruto fumando, porque me gusta fumar, sino me gustase, no fumaría; también soy consciente que solo voy a vivir una vida, y pretendo vivirla, ahora mismo, no tengo muchos planes, pretendo vivirla sin más, parece que todo lo que tenía pensado, ha pasado a un segundo plano, porque ahora mismo es lo que toca.
Este año, parecía que iba a acabar bien, faltan todavía unos meses, y de bien, tiene poco, sencillamente, son pequeños atisbos, baches que recorren una carretera que parece que tiene tantos semáforos (nunca me han gustado los semáforos) que tengo que parar en todos, y reposar principalmente reposar.
Mi objetivo a todo esto, es no creer en los agobios de mañana sino solo creer en el aprendizaje de hoy, porque aunque siempre he dicho que vivo el día a día, me filtraba por mis pensamientos y bagar entre ellos, y ver las metas que me había planteado, pero ahora, se ha vuelto no sé si decir a truncar, porque toca de nuevo, esperar, esa larga espera, le voy a coger cariño y todo al final... llevo tanto esperando, que parece que no sé hacer otra cosa.
Ahora, solo hay algo en mi mente, y ese ese silencio que ensordece mis pensamientos, porque mañana, hace ya una semana.
Ahora, solo hay algo en mi mente, y ese ese silencio que ensordece mis pensamientos, porque mañana, hace ya una semana.
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